Vals Repetto

Siglo XIX. Canciones de una nueva nación

Obra: Vals Repetto
Compositor: Federico Guzmán
Texto:
Cantante: Claudia González-Serrano, soprano
Pianista: Yudalis Perdomo

Ir a la partitura


Ayudas para la interpretación (116Kb)

«Vals Repetto»

Esta partitura se publicó en Lima en 1875, también en Francia por la casa Choudens, y está dedicada a la soprano Elvira Repetto Tresolini, cantante de fama mundial que tuvo un exitoso paso artístico por América (en la partitura original su nombre aparece mal escrito, como «Elvina»). Cotejando la información que hasta el momento tenemos, por fecha se trataría de la última pieza vocal publicada o compuesta por Guzmán. Se trata de un vals cantado, muy a la moda con piezas similares europeas, que eran la delicia del repertorio sopranil de concierto, como aquellos ejemplos de Luigi Arditi («Parla», «Il baccio»), o las famosas arias valseadas de Gounod (para sus heroínas Margarita o Julieta); y por ellos es fiel al modelo: obras de virtuosismo vocal (a veces obligado, a veces a partir de notas opcionales y variaciones) sobre un texto genérico amoroso, construida ya fuere en forma de rondò o con secciones sucesivas, pero manteniendo la estructura de secciones bien delimitadas y un final que va sumando coloraturas o ritmo vertiginoso a la búsqueda de un final espectacular. En este caso se puede cantar sobre un texto italiano u otro francés, anónimos, de similares conceptos, pero siendo el texto francés un poco más extenso. La obra es una composición por derecho propio, pero nacida como un obsequio, una dedicatoria que seguramente busca la inclusión de este vals en el lucido repertorio de la homenajeada. Recordemos que en su paso por las temporadas líricas del Teatro Municipal de Santiago entre 1875 y 1877, la Repetto se adjudicó el repertorio tradicionalmente dado a sopranos de lucimiento vocal agudo: «Rigoletto», «La Sonnambula», «Linda di Chamounix», «Lucia di Lammermoor», por ejemplo. De hecho, tenemos noticia de que el vals será cantado por la propia Elvira Repetto en Perú el 12 de febrero de 1875, en un concierto en el que fue acompañada por el propio compositor. También será cantado por Rosa Vache, prima de Guzmán, quien lo acompañó en sus giras a partir de 1879.