Compositor holandés, anunciado además como pianista de S. M. la Reina de Holanda. Vivió en Francia y, por encargo de la empresa Luis Pradel, organizó la Compañía Lírica que vino en 1857 a la inauguración del Teatro Municipal de Santiago. En esa ocasión llegó con la soprano Sofía Amic-Gazan (cuyo verdadero nombre era Gertrudis Schmidt), con la que estaba unido sentimentalmente. La empresa antes citada volvió a solicitar a Ricardo Mulder que regresara a Europa para contratar una nueva Compañía Lírica para la temporada de 1858. En ella se encontraba la destacada soprano austríaca Inez Fabbri (o Agnes Schmidt), de la Ópera de Hamburgo, con la que no solo se casó sino con la que huyó de nuestro país e inició una gira sudamericana, provocando un escándalo ventilado en los periódicos y dejando a la Compañía Lírica en bancarrota.

Se radicará con la Fabbri en los Estados Unidos y Europa, siguiendo la exitosa carrera de su esposa. A nivel biográfico es poco lo que se sabe de Ricardo Mulder, aunque sí es de relativa circulación su composición pianística, por lo que las siguientes dos obras que incluimos en la presente antología son un aporte al presentarlo en la faceta vocal, para soprano y además en castellano, ciertamente por estar ligadas a su estadía en nuestro país y al servicio vocal de quienes fueran dos de sus parejas sentimentales.